Soy todo lo que viví y el resto de lo que fui lo aprendi con el tiempo. Se que soy lo que sueño.
Aprendí de vivir, de borrar, de escribir, de tocar el cielo y de caer con ganas de volver. Aprendí de llorar, de reir, de soñar, de ir al fin de mundo y regresar con ganas de volar. Aprendí de latir, de querer y de seguir libre.
martes, 2 de abril de 2013
Disfrutando el tiempo de estar en un lugar especial, donde las estrellas no alcanzan, donde no llega el sol y es de día.
Hablar de amor resulta imposible
si el viento no acerca
tu nombre hasta mi.
Llevo tu imagen despierta y esté donde esté abro el alma y te veo.